Pues ha ocurrido en la localidad alemana de Sondershausen en la cual una mujer se ha divorciado de su marido (despues de 15 años de matrimonio) porque se pasaba el día reordenando la casa y moviendo muebles.
Y yo me pregunto... ¿qué mujer no estaría deseosa de que su marido limpiase la casa y ella se dedicase a leer una revista, descansar o ver la tele?
Pues según la noticia original, "La gota que colmó el vaso llegó hace dos años cuando, al regreso de un largo viaje, la esposa se encontró con que el marido había redecorado completamente la sala, derribado un tabique y levantado una nueva pared sin consultarle. Todo ocurrió porque detrás de un armario surgía un mal olor y que al mover el mueble el marido comprobó que la pared estaba enmohecida, por lo que tiró los muebles, derribó la pared y redecoró toda la sala."
¿Y se divorció porque redecoró la casa, o porque no la consultó? Ahí dejo la duda...
yo no lo hubiera dejado, le hubiera jurado amor eterno
ResponderEliminarJe, je... habrá que localizar la dirección de este hombre...
ResponderEliminarSeguro que fué porque en ese 'largo viaje' conoció a alguien y no se le ocurría otra excusa más para dejar al marido.
ResponderEliminarEs que ya lo han hecho.
ResponderEliminarMira esta excusa
Simula un secuestro